AMOR, AMOR Mi semilla fecunda hinchará tu cintura, y la vida de nuevo brotará de tu vientre,
GLORIA Y LOS DOS PUEN… Desde el Puente de Piedra se divi… el nuevo puente con hierro constru… que en candados, de amor comprome… dulce nudo de amantes eterniza.
EL COLIBRÍ Fragmento de la luz, vivificado en el instante exacto del aroma; que entre los rojos pétalos se aso… para quedar en ave transformado.
ESTA NIÑA ES MUJER La joven colegiala que se asombra… que han sufrido sus formas en los… descubre exquisiteces mirándose al… pues ha visto que nacen en su pech…
PERJURAS MARIPOSAS Un enjambre de aflictas mariposas, cansadas de la efímera existencia, a dioses del jardín piden clemenci… por su anhelo de ser como las rosa…
PELEA DE GALLOS Excitado su cuello de granate, no lo intimida el fiero contendor que belicoso, audaz y sin temor hasta morir lo reta, en el combate…
NO TE VISTAS CON VEST… Cuando me muera, no te pongas tris… y no te vistas con vestido negro; no tienes que decirle al mundo que muy sola te sientes por mi mue…
EL LAZARILLO DE CRISTO Una imagen del Dios crucificado, tallada, en la madera, por artista… incompleta se muestra ante la vis… queriendo mutilarnos el pecado.
MIÉNTELE A LA GENTE Miéntele a la gente, miénteles a todos, diles los que quieras: que no me conoces,
EL LIBRO Es el papiro su ancestral parient… que sabio sacerdote cortesano guardaba en pliegues para el sobe… que anhelara saber del tiempo aus…
MÍTICO ORIGEN DEL LENGU… Al principio existieron los soneto… en boca de los dioses canturriados… pero luego, a raíz de sus pecados, por la tierra, anduvieron, incompl…
MARÍA JOSÉ ¿Por qué no querías venir a mi lado? ¿Por qué no querías llegar a mi puerto?
RAMILETE DE ROSAS Y AFE… Si pudiera inventar un idioma de palabras gallardas... lo hicier… para darte las gracias Graziella, por el canto tan dulce y celeste
HIMNO MARCIAL Los timbales, cornetas y tambores invitan a la guerra despiadada, porque la patria ha sido maltratad… en su suelo, en sus sueños y color…
CONSTANCIA DEL RETORNO ¿No queremos a diario, recibir del… su benéfica luz y resplandor? y del agua fresca, del viejo tinaj… ¿no queremos sus encantos?
