¿Quién soy yo?
Días de lluvias,
días sin Sol;
dime, ¿quién soy yo?
Ese suspiro del lamento
que hace eco en el hueco,
que vacía el color de tus manos cándidas,
que solloza el castigo de un ateo escribano.
Y dime, ¿quién soy yo?
Luces apagadas
en hielos encendidos
por el furor sin amor;
por la hiedra regada
con la mínima lágrima caída
de los ojos del usurpador.
¿Quién soy yo?
Y no más
que un ramal de hojas firmes al viento
y desertoras de la tempestad
que brillan en otoño
mientras sus plumas en primavera
dejan caer ya.
¿Quién soy yo?
Ese humo solitario
que vaga por la casa en vela
haciendo juego con el polvo de tus bolsillos
y el hilo de mi destino;
y quién soy yo sino ese poeta
que ya su alma entregó en los primeros versos que escribió.
Sí, soy yo.
