(1986)
#EscritoresEspañoles Kampa
Ya se acercan las manos, innumerables manos, negras manos, a cegarme los ojos, a detener mis piernas,
No hay piedad en el hombre. Te obliga a beber hasta las heces tu propia soledad. Todo lo más se calla y sigue su camino
Cayó una estrella verde ante mis o… y sus chispas naranjas señalaron el camino. Los abedules se apartaron. En mi vagar solitario por los bosq…
Ah del ladrón que robó la blancura y la depositó sobre los trigos No pensó que los cuervos
Prisionera de un pánico invencible… y aunque sé de la inutilidad de to… desde esa cárcel torturante que es… pido la autonomía total del hombre y el derecho a no justificar para…
Fue al alba, perdona por la hora. Tus párpados del sueño callaban debajo de mi almohada y al irrumpir la luz primera
¿Oyes esa música que cruza como luz la oscuridad mientras la oscuridad gira y yo con ella? ¡Con qué fuerza
Miré las aguas y vi su gesto grácil y vi en mis ojos su mirada y ardió el río con el dardo de amor,
Se arranca el perro asirio de las… y, a su primer aullido, luna y estrellas hacia el sueño as… mientras el sol, aún desde su negra efigie,
Los latidos estallan en mis labios que ya apenas murmuran: come, death and wellcome! Sobre el ansia desértica de tu carne de agraz arboladura
Llegarán los almendros en flor a t… huídos de mi pensamiento, y el temblor del olivo que se estremece al paso de la noc… Pero yo, cada vez más perdida en t…
Una red sobre un carro. Gris. Una red sobre un hombre.
Isla del suicidio en apariencia muda, arranca la sonrisa de tu cara. Muestra la ambigüedad
Una vez más el paisaje fugitivo, el lago, los valles, los árboles que corren como ríos. Llega una nube y ciega la mirada;
Torre del alma la morada más alta hacia ópalo el destello en vertical ascenso por el camino oculto