Se arranca el perro asirio de las… y, a su primer aullido, luna y estrellas hacia el sueño as… mientras el sol, aún desde su negra efigie,

¡Era una chica tan alegre! En clase se reía sin parar. Se equivocaba siempre en las decli… y sin embargo podía hablar de todo e incluso pronunciaba bien la r .

Cayó una estrella verde ante mis o… y sus chispas naranjas señalaron el camino. Los abedules se apartaron. En mi vagar solitario por los bosq…

La mano en el saúco del leteo, la sombra sigue insomne de otra mano, una mano que nombra, que desbroza el camino,

Quizás bajo la superficie haya un… sueño del color. Entra la aurora s… y es un desgranarse de visos que m… arenas, un mundo que se inicia en… hasta que se incorpora al ritmo de…

A veces el poema es el objeto o do… y con más evidencia pone de manifiesto ese propósito: dar luz a una palabra sin quitarle su magia

Desconfía de aquellos que no han considerado nunca el suicidio. Van haciendo paso a paso el camino… cegándose al abismo que siempre ac…

Fue al alba, perdona por la hora. Tus párpados del sueño callaban debajo de mi almohada y al irrumpir la luz primera

La muerte no, mejor esa agonía muda, mejor ese sentir que la vida por causa del deseo

Isla del suicidio en apariencia muda, arranca la sonrisa de tu cara. Muestra la ambigüedad

haber salido al campo y sembrado la tierra, pero te has encerrado a cavar en la tierra del cerebro y

Ah del ladrón que robó la blancura y la depositó sobre los trigos No pensó que los cuervos

No era el alba de hielo, no era de… vida, no era la antorcha de sus oj… do se despertaba el campo no era d… el pensamiento abría una zanja acu… constituirse en veta interior... E…

Soy hermosa y mi piel es suave y el viento del mar me devuelve ro… de tiernas tersuras. Mi cabello perfumo y adorno de áur… y mi pecho es redondo y casi virgi…

Los latidos estallan en mis labios que ya apenas murmuran: come, death and wellcome! Sobre el ansia desértica de tu carne de agraz arboladura