haber salido al campo y sembrado la tierra, pero te has encerrado a cavar en la tierra del cerebro y

Fue al alba, perdona por la hora. Tus párpados del sueño callaban debajo de mi almohada y al irrumpir la luz primera

Mi vida es una brasa rodeada de muerte. De aquí no saldré más, nunca tuve valor... Cuando el amor

Cayó una estrella verde ante mis o… y sus chispas naranjas señalaron el camino. Los abedules se apartaron. En mi vagar solitario por los bosq…

No era el alba de hielo, no era de… vida, no era la antorcha de sus oj… do se despertaba el campo no era d… el pensamiento abría una zanja acu… constituirse en veta interior... E…

Se arranca el perro asirio de las… y, a su primer aullido, luna y estrellas hacia el sueño as… mientras el sol, aún desde su negra efigie,

El banquete que os propongo es par… y responde al amor que yo siento y… pido que se me coma, que mi ser en no ser no se mude sino en puro alimento;

Se esboza la posibilidad de la hierba bajo su cuerpo: una brisa que insinúa el renacer. Pero siguen los mudos clavos tensando la separación. Nada entra ni sale de la boca del caballo. ...

No hay piedad en el hombre. Te obliga a beber hasta las heces tu propia soledad. Todo lo más se calla y sigue su camino

Murió desintegrado, la cabeza en dos tajos, los sesos por el suelo todos desparramados. Murió como una estrella

Te brillaban dos lágrimas por fin nos despedimos sin poder compartir el aluvión de… pero tú me sabías rompiéndome en aceras

Una vez más el paisaje fugitivo, el lago, los valles, los árboles que corren como ríos. Llega una nube y ciega la mirada;

Los latidos estallan en mis labios que ya apenas murmuran: come, death and wellcome! Sobre el ansia desértica de tu carne de agraz arboladura

Soy hermosa y mi piel es suave y el viento del mar me devuelve ro… de tiernas tersuras. Mi cabello perfumo y adorno de áur… y mi pecho es redondo y casi virgi…

Nunca sabré de ti, y eso lo supe desde el primer encuentro. Esta certeza tiene tanta fuerza que es