#Mujeres #Nicaragüenses #SigloXX #SigloXXI
Yo sin ti pero contigo llevando a cuestas tu muerte. Mi soledad y la tuya
Barajando recuerdos me encontré con el tuyo. No dolía. Lo saqué de su estuche, sacudí sus raíces
Solos de nuevo solos sin palabras sin gestos sin adornos
Porque aprendí a quererme puedo sangrar con tus heridas.
Fui la nube y la lluvia y el mar y quiero ser la tarde y la muralla
También me gusta el amor al que le cierran la puerta el que entra por la ventana volando sobre una cuerda.
Ya la ceiba no existe derrumbaron mi ceiba se hicieron añicos los espejos eché a secar mi Río y se escondió la luna.
En este aposento que soy yo mi realidad (la cotidiana ... realidad)
Soñé que era un ala desperté con el tirón de mis raíces.
No sé si con tu muerte has quedado a la zaga ¿eres recuerdo? o has dado un salto repentino
Mi laberinto es circular voy cavando en el aire con los ojos clavados en la muerte que me bebe
Nunca más esta lluvia ni esa mancha de luz en el peñasco ni el borde de esa nube
Tu muerte te congela estás inmóvil mi vida en cambio fluye y me acerca veloz
Creí pasar mi tiempo amando y siendo amada comienzo a darme cuenta que lo pasé despedazando
Yo, poeta de oficio, condenada tantas veces a ser cuervo jamás me cambiaría