Loading...

SÓLO CON MIRARTE

Un día más y la ilusión me crece
subiendo por los muchos escalones
que con cariño y sin cesar me pones
para al cielo llegar, que tal parece.
 
Al tiempo, la desdicha me decrece,
la que he llevado siempre a los talones,
y ya y por las mismísimas razones,
compruebo que a la par desaparece.
 
Me vino Dios a ver cuando al mirarte
se encontraron tus ojos con los míos
y enseguida noté que me surgía
 
la gana incontenible de adorarte
y por mis venas me corrieron ríos
más dulces que el sabor de la ambrosía.

Other works by Cristino Vidal Benavente...



Top