Hay veces que no encontramos el camino.
Que como si estuviéramos en un laberinto no encontramos la salida y volvemos al inicio.

La vida es un juego complejo, donde mas nos empeñamos en tener,   menos tenemos. Cómo en un partido de futbol debemos aprender cuando correr y cuando detenernos, cuando buscar por los costados o por el medio.

Debemos entender el para qué y luego pensar el cómo. Dejar de tirar balas de salva o de quemar pirotecnia barata, en actos sin sentidos que lo único que sirven es para alimentar el ego.

Porque vivir es disfrutar, es reír es   simplemente compartir un momento sin ser ni parecer, simplemente  contemplar en silencio, viendo lo que no vemos. Apagando las redes sociales y descubriendo un momento único e irrepetible, ese segundo de vida que no está en ninguna selfi, ese segundo que es para mi con migo mismo.

Hay veces que no encontramos el camino. Y  nos empeñamos en encontrarlo, cuando  simplemente debemos animarnos a descubrirlo, con la ventanill abaja y el viendo acariciandonos la frente.