Si quieres, me invades el silencio con tu callada sonrisa, si quieres, me aprietas con tus manos los lazos sueltos, si quieres, buscamos sombra tras del sol, si quieres, me compartes del aire, si quieres, del olvido.
A menudo frecuentaba lugares en mi memoria que añoraba poder olvidar, merodeaba ahí de vez en cuando, lo hacía por si en algún momento aquello que había tomado parte de mi vida me llega...
Así, podría pensar usted qué es un extraño perfecto. Me acerqué a su puerta, una endeble madera de cedro corroida por el olvido, y mucho antes de que usted se apiade de la soledad de la...
El universo de sus ojos había sido…
La Soledad es un don, uno del que… La Soledad es un pecado arcaico d… Es un cálido abrigo que estremece… La soledad, compañera mal habida d…