Del país del sueño, tinieblas, bri… donde crecen plantas, flores extra… entre los escombros de los castill… junto a las laderas de las montaña… donde los pastores en sus cabañas

En el kiosco bien oliente besé tanto a mi odalisca en los ojos, en la frente, y en la boca y las mejillas, que los besos que la he dado

El amor está en las rosas, las rosas son el amor, cupido anda entre las cosas, y hace de ellas una flor. A veces despierta un nido,

Argentina, el día que te vistes de gala, en que brillan tus calles y no hay aspectos ni almas tristes en alturas, pampas y valles; el día en que desde tus fuertes,

¿Eva era rubia? No. Con negros oj… vio la manzana del jardín: con lab… rojos probó su miel; con labios ro… que saben hoy más ciencia que los… Venus tuvo el azur en sus pupilas,

Y dijo la paloma: —Yo soy feliz. Bajo el inmenso ci… en el árbol en flor, junto a la po… llena de miel, junto al retoño sua… y húmedo por las gotas de rocío,

¿Que por qué así? No es muy dulce la palabra, lo confieso. Mas, de esa extraña amargura la explicación está en esto: después de llorar mis lágrimas

De D. Luis de Góngora y Argote… Mientras el brillo de tu gloria au… ser en la eternidad sol sin ponien… fénix de viva luz, fénix ardiente, diamante parangón de la pintura,

¿Cómo decía usted, amigo mío? ¿Qué el amor es un río? No es ext… Es ciertamente un río que, uniéndose al confluente del d… va a perderse en el mar del deseng…

Yo fui un soldado que durmió en el… de Cleopatra la reina. Su blancur… y su mirada astral y omnipotente. Eso fue todo. ¡Oh mirada! ¡oh blancura! y oh, aq…

Es la tarde gris y triste. Viste el mar de terciopelo y el cielo profundo viste de duelo. Del abismo se levanta

Un poeta egregio del país de Fran… que con versos áureos alabó el amo… formó un ramo armónico, lleno de e… en su Sinfonía en Blanco Mayor. Yo por ti formara, Blanca delicio…

A un tal que asesinó a diez y era la imagen del vicio, muerto, el Soberano Juez le salvó del sacrificio sólo porque amó una vez.

Van los insectos primorosos, que son la gracia y la alegría, olando al sol colaginoso como un tropel de pedrería. Pasan las líricas abejas

Señora, el Amor es violento, y cuando nos transfigura nos enciende el pensamiento la locura. No pidas paz a mis brazos