Eras tú
Y escuché de la nada un suave soplo detrás de mi oreja, era cómo el tuyo, pero su soplo no olía a cigarro. Me quedé paralizada esperando algo más y de la nada sentí como movía mi cabello para un constado de mi hombro y me dijo
—Tu olor es tan fresco.
Sentí como mi piel se erizaba, era cómo tú voz pero más ronca.
Luego agarro mi mano, era áspera pero no sabía por que te sentía.
Después sentí un beso despacio en mi nuca, era cómo tus labios y tú saliva tibia pero no demoró mucho, tú solías durar más.
Me acerco a un espejo y lo vi y la vi, y claramente supe lo que ocurría, éramos nosotros, con diferentes cuerpos y con diferentes cómodo de llamarnos, de tocarnos... pero lo intacto eran nuestras almas. Me di cuenta que lo nuestro era un amor tan real que creamos otra dimensión para seguir amándonos ya que está caducó.
