Dori Gómez
Flor carmesí regálame tu aroma la mece el aire ¡Ay! frágil amapola pétalos vuelan
Que yo no me voy que soy el suspiro del aire que pa… que soy tu memoria, tu alma, que respiro tu olor en la distanci… que soy amor
Cuerpo que espera arena movediza caricias suaves en su piel un desierto el placer a ella llega.
Nunca te mirarán a los ojos como y… con el amor saliendo de mis pupila… con el abrazo silente de mi respir… Nunca te besarán como lo hice yo bebiéndome la vida de tu boca
No sé que me pasa, pero la vida se me va en la mesa sentada la mente me abrasa. La televisión me da hastío
Me late fuerte el pulso al contemplarte desnudo mi corazón está disparado solo con tocar tu boca ardo de amor y deseo.
Flor del manzano entre el suave cielo índigo. Liba la abeja. Toman café en el otoñal patio.
En un mar de hierba margaritas le bailan nubes brillando Verano insomne toda la ciudad rosa
En el salón mirando la tele te observo, nosotros guardamos otra cuarentena. Mi mente masturba los pensamientos solitarios
En aquel prado la mariposa vuela libando versos. Bajo la lluvia el sol muere en la tarde,
Café tan negro como los ojos de él. ¿Por qué te fuiste? Quizás te vuelva a ver y oiga tu voz.
Banco con nieve los árboles helados luz en la noche. Ramas de nieve flores de color rosa
Aún tengo tu aroma en mí, a esa noche de pasión y locura. Estoy impregnada de tus besos que dejaron la humedad de tu boca en mi piel.
Hay un lugar que me mata, me rompe sin embargo, siempre estoy ahí. Un sitio perverso donde el dolor es el placer
Amo que me digas que me amas que a pesar de mis cicatrices esté… que la cama se mueva noche tras no… llena de deseo, lujuria, pecado de… las llamas lamen nuestros cuerpos…