haiku
En aquel campo miro la margarita de blancos pétalos. Flores de primavera adivinas de amores.
Daría lo que fuese por un beso de… un beso largo, húmedo, hirviendo, entre palabras entrecortadas,
Los cadáveres del amor saltan hacía nosotros aún demasiado fresc… aún laten en ellos la sangre llena de fluidos del eterno amor c… Sus ojos miran con deseo
Cariño, nunca dejes de buscarme cuando la soledad te coma no importa que no me ames siempre serás mi amigo. No sé como decirlo
El mar espléndido dona su arte, en el brillo de los cristales. Besan el lago esas flores de loto,
No me quise rendir calles de noche en Granada viento mortal que azota mi cara; pero seguí andando por ti, no, no, me quise rendir,
En aquel callejón bajo la luz mortecina tu mirada se cruzaba con la mía. Ojos de serpiente boca de lava ardiente
La amistad es algo valioso tanto, que nada en el mundo existe para pagarla. No estoy hecha para estar sola, necesito el roce de una mano,
Aletea la mariposa anunciando la primavera se posa en mi nariz mis ojos bizquean mirándola. Cuantos colores en mi ventana,
Estación Con qué alegría se viste de colores la bella primavera las margaritas
Eres el dolor en mi alegria la punta de tu lengua tiene espina… aún así no me importa sangrar si te puedo besar como demente tu mirada fría me calienta.
Mar de las flores, el cielo se confunde en el azul. Hipnóticos los campos sus colores deslumbran.
Pasar la noche bebiendo de tu boca sorber tu vida en este ocaso ardiente. Detengo el tiempo,
Ya no recibe un beso al despertar, él se va sin decir adiós. Hace tiempo que no es feliz, lágrimas caen al suelo, veinte años casados, diez desde que él una mañana fría se fue al trabaj...
Aún pienso entre sábanas de raso e… en mi soledad sé que solo sentí am… cuando te acariciaba, Lucía. Estas ganas de vivir junto a ti en… jugando a encontrar nuestras manos…