Poesía japonesa
No supe retenerte en mi pequeño mundo tú querías fotografías, yo, quería amor del bueno. Ahora sé que debí
Por la noche hablo al oscuro, iluminado por las estrellas, brillantes como cristales; donde la luz se refleja,
Tienes la piel dorada como miel de colmena, bajo el cielo rojo y naranja, pareces una diosa griega. Cuando te vi, sin esperarlo
Adrenalina pura me sube por todo el cuerpo con este riesgo de hacer el amor en cualquier lugar que pillamos.
Amigo mío, hoy quiero contarte, que cuando te vi me enamoré hasta de la sombra que bajo la farola vi. Qué mis pensamientos
Un río de calor líquido bajaba ent… él exploraba cada centímetro de su… en las sábanas albas dos cuerpos s… se entrelazaban. Devorándose a besos los amantes
Adoraba la sensualidad de la hierba en mi espalda, tocar la tierra, amasarla con mis manos. Me hacía sentir viva,
Me das un morreo de despedida que me deja tiritando todo el día, pienso, que no falten tus besos. Cuándo llegas por la noche
Te miro desnudo tus piernas firmes tu cuerpo hermoso, me acerco y te como la boca hasta que nos
Solo soledad en esta expiación que me lleva a suplicar este día amor dejaré atrás la cobardía solo quiero que en esta redención, pueda decir que yo no te mentía
Era una tarde de noviembre paseando por el Albaicín lo vi por última vez, me miró con sorpresa cerveza en la mano.
Sobre mi boca dibujando una lágrima, en la tez nívea aflora del olvido; sonando al alba
Trenzas mi pelo con cadenas de pena, pendientes de coral, anuncian muerte cae suave una lágrima,
Vi a Venus venir hacía mí, su belleza anulaba al astro su manera de caminar dejaba pequeño el movimiento lunar.
Todo fue tan bonito cuando nos con… amor a todas horas, mañanas de bes… interminables, tatuajes de amor en el corazón. Pero sin darme cuenta fuiste cambi…