Reniego de este existir sin tu risa loca y descabellada abotonado a mi espalda cada vez qu… palabras que palpitan sudorosas en un papel amarillento y desleído…
De nada sirven hoy esas voces que atormentando me llaman ese rasguño de sombras incoherente… cuando la luz se agota, y se hace un imperceptible
Hay una sombra gris en el cristal de mi ventana que con su espíritu desolado se inclina como volutas, en formas débiles
Escalo intrépida la curva de este tiempo desgastado por conc… voy despejando el camino de todos los nombres imperfectos que anidan mi conciencia,
Desde este vértigo infiel que me p… Y esta sed que arde exenta de pal… cuando la esperanza espera sus mue… acrisolada en un río oscuro y cubierto de escombros pestilent…
Reniego de este existir, sin tu risa loca y descabellada abotonado a mi espalda cada vez qu… Palabras que palpitan sudorosas en un papel amarillento y desleído…
En las alforjas vacías de la conci… reminiscencias de antiguos ritos p… en el domicilio de una calle arrop… que giran hacia la nada tratando… al vórtice de sus juegos apasionad…
Bajo la resaca de este mar cansado de parir tantos desencuentros Renace en ti de nuevo este amor como el ave fénix... Para coserlo con hilo visionario
Silbando en este instante sólo el viento lograría escucharme presente en las ausencias de espacios que me mienten
Llega la lluvia con su perfumado viento; ligero y tenaz... sin equipaje con su triste sonido de abejas des…
Sopla el viento con su letanía de… es de nuevo el otoño que azota en un silencio despeñado... perdidos a deshoras en el tiempo, entre las palabra probable
Cuando seamos huesos y cenizas te encontraré después allá en el… cuando solo seamos huesos o ceniza… ¿Quién sabe donde? Puede ser que este legado de palab…
Desnudándome del desnudo que me di… mis ojos ya no son más... que la milésima parte del fanal de… Soy la lumbre efímera... la imposible divisa destrozada
Escribir y vivir son espectáculos… saltos al vacío, con las maletas colmada de histori… en los que se han derramado cántaros de promesas rotas.
La poesía es como el viento, o como el fuego, o como el mar. Hace vibrar árboles, ropas, abrasa… hojas secas, acuna en su oleaje los objetos que duermen en la play…