a Cecilia
Año 8AD (Antes de mi Domadora). Han pasado cuatro años de aquella ocasión en que este Corazón Apasionado confesó su enamoramiento a una compañera universitaria. Ella muy amablemente le dio las gracias y dijo que por lo pronto no era el momento y se alejo emocionada. Al pasar de los meses le llegó de golpe un enamoramiento espectacular hacia otra compañera que le caló hasta el tuetano y olvido momentaneamente lo pasado. Sin embargo con esa misma intensidad lo tumbaron de la nube en que andaba sin que hubiese hermosa creatura.
Con el paso del tiempo, habiéndose apasiguado las aguas lo suficiente para pensar con claridad y recordando aquellos días de hace 4 años, sobre todo sus ojos, decidió dedicarle un Soneto Nocturno. Y sí, lo escribió en una hoja de papel y se lo entrego a quien en ese momento era una de sus amigas más queridas, excelente compañera de carrera y la única que lo ponía nervioso cuando ella le preguntaba su opinión sobre cualquier tema (lo mismo le ocurre con su Domadora quien tiene unos ojos similares. Si Áquiles tenía como punto debil su talón, el de nuestro Corazón Apasionado son esos ojos que si lo miran hacen que su alma tiemble de amor).