Para Abel Quezada
#EscritoresMexicanos (1949-1953) Los de poemas viaje
Estar simplemente como delgada car… como huesos y aire cabalgando en e… como un pequeño y mustio tiempo duradero entre penas y esperanzas… Estar vilmente atado por absurdas…
Tienes la frente al alba: ella cuenta los poros de tu cuerpo… en laderas del sueño, con los hombros quemados. En el alba se vierte la costumbre…
Apoyada En este hombro Eres mi alba derecha Apoyada En el otro
Eres, amor, el brazo con heridas y la pisada en falso sobre un ciel… Eres el que se duerme, solitario, en el pequeño bosque de mi pecho. Eres, amor, la flor del falso nomb…
Supón, mi amor, que trazamos la ho… y que el agua es la medida de toda… Piensa, azucena, en un becqueriano… presente a nuestro paso, inmerso e… Siempre hay alguien desnudo en lo…
¡Qué Raro Que me LLame Cocodrilo!
Yo era Un tonto Y lo Que he Amado
Te repito que descubrí el silencio aquella lenta tarde de tu nombre m… carbonizado y vivo en la gran llama de oro de tus die… Mi amor se desligó de las auroras
Alguien Revelaba: «Las tardes En que Me siento
La del piernón bruto me rebasó por… rozóme las regiones sagradas, me v… y se detuvo en el aire viciado: ci… de la Ruta 85, donde los ladrones me conocen porque me roban, me pis…
Cuatro jinetes de pólvora derriten… Cuatro fantasmas de plomo cavan la… Uno, dos, tres, innumerables asesi… Un jinete de enrojecidos ojos caba… Algo como una lejana tristeza suce…
No hago nada esta tarde sino pensar —y es mucho—en la dich… Nada sino pensar en una hija llama… en una amante Dicha nombrada. Ésta sería alta y soberbia como di…
Bajo la luz de la luna, en Beaumo… los blancos a la derecha, los negr…
Día y noche, pero Más noche que día, Eunice dialoga y riñe Con los altos mastines. Palabras y ladridos,
La llamaron Así Y con razón Se pasaba la vida De cama en rima