Este lánguido caer en brazos de un… esta brutal tarea de pisotear mari… este pensarse árbol, botella o cho… huella de pie dormido, navaja verd… este instante durísimo en que una…

Agua espesa, divinamente pantanosa… agua de olvido, espejo de tiniebla… agua donde penetra el alma y nada… Fresca agua para el rostro, para t… mancillada y expuesta

Señora mía: sus labios son perfect… y su mirada tan grande me tiembla… su falda de terciopelo naranja me… —y su andar, como su bañar y habla… un cisne afilado corrigiendo vocab…

.Nació En Silao. 1914. Autor De versos

Donde habita, donde come, donde parece un arenoso acantilado, allí es un cordero de ámbar con oj… y algo acerca de la dicha sexual t… Luego viene lo intolerable y malig…

Tú no veías el árbol, ni la nube n… Ya tus ojos la tierra se los había… y en tu boca de seda sólo un poco… fugitiva de rosas, y un lejano sus… No veías ni mi boca que se moría d…

Más despacio que nunca, casi agóni… marchan y duelen estas voces o est… Húmedos pies descalzos, breves pie… dulce origen, impío desorden. Voce… que purifican lo que tocan. Voces

Éste es un amor que tuvo su origen y en un principio no era sino un p… y una ternura que no quería nacer… Un amor bien nacido de ese mar de… un amor que tiene a su voz como án…

Muy buenos días, laurel, muy bueno… Desde el alba te veo, grandiosa es… y eres, en mi memoria, esencia de… Olaguíbel te dio la perfección del… serena, rodilla al aire y senos ha…

Uno pierde los días, la fuerza y e… el cálido amor a la mujer cálidame… la voluntad de vivir, el sueño y e… uno va por ahí, antorcha, paz, lum… deseos ocultos, lleno de locura y…

Cuatro jinetes de pólvora derriten… Cuatro fantasmas de plomo cavan la… Uno, dos, tres, innumerables asesi… Un jinete de enrojecidos ojos caba… Algo como una lejana tristeza suce…

Apoyada En este hombro Eres mi alba derecha Apoyada En el otro

Día y noche, pero Más noche que día, Eunice dialoga y riñe Con los altos mastines. Palabras y ladridos,

Labios como el sabor del viento en… dientes jóvenes de luna consentida… Se endurecía la noche en tu gargan… Espacio duro de tus senos. Amaril… la inesperada sombra de tus pierna…