Amo todo lo que tiene ver contigo amo tu universo, cuando te pienso cuando te miro, cuando estás conmi… Amo nuestros más íntimos secretos amo todo aquello que nos une

Recorriendo un camino largo y estr… lleno de hojas secas y la melancol… las flores marchitas y sus quebran… pétalos, se divisa a lo largo un p… muy hermoso y colorido al mi alred…

Quise acariciar la felicidad al disfrutar de tu hermoso rostro entre besos y caricias y ante los primeros rayos de sol pero ..... ¡Ho sorpresa!

Recuerdo, ahí estaba yo, con flores en mi mano efervescente de emoción lleno de nuevas ilusiones mi alma en transparencia,

Las cicatrices son huellas de que alguna vez sufrimos algún dolor. Siempre las heridas

Allá va el caminante en su mano rosa roja por camino de espinas símbolo de esperanza paz para el mundo

¿Quién eres tú? Eres el ángel que bajó del cielo q… Eres real y verdadera, que con tu… ¿Quién eres tú? Eres el ángel que trajo paz y nuev…

El ser más nocivo y peligroso es aquel que no se quiere ni así m… aléjate lo más posible de él porque de seguro te llevará al abi… Mas peligroso es el envidioso

Son tus ojos culpables de que yo t… Tus ojos son para mi toda un mar d… En ellos veo la luz del sol. Ellos iluminan mi alma, encienden… Tus ojos muestran de ti toda tu pu…

Si aquellos que me critican supieran como te veo pudiesen por lo menos deducir la magia y todo el encanto que yo percibo en ti

Serás mi esposa, aunque no vayas d… serás tan pura como cualquier novi… estaré muy orgulloso de ser tu esp… nos tomaremos de la mano y paseare… felices delante de toda la gente.

Recuerdos de nuestra mágica y romántica luna de miel. Al calor de arena mar y playa con alucinantes, majestuosas y asombrosas puestas de sol

Al partir con rumbo a exttañas tie… En mi alma se evocan mis días vivi… De volver a mi pueblo querido, a m… El alborozo de mi corazón de mi pr… Quizás a mi regreso no lleve rique…

Hay amores que duran un día, como aquel de Don Juan tenorio, que enamoró, engaño y perdió en el mismo día a su dulce y amada Lucía. Hay amores que duran años como el de aquel pastor con...