Esos ojos que me hacen trasnochar, en la noche oscura, como estrellas… son el faro que guía mi navegar, en el mar profundo de mi soñar. Esos ojos, que con su mirar encant…
Con giros de peonzas, Se despierta la poesía, Que aroma a almoraduz danza, En un verde alféizar, día a día. El jazmín, desprendido de enrejado…
En el límite donde el mundo se aca… Allí donde el silencio se adueña d… Donde la luz se desvanece en sombr… Y el tiempo se detiene en un insta… Allí, en ese confín del universo,
Vi a un hombre de ojos inquietos y… —Un verbo que pese lo suficiente p… Había en su voz la urgencia de qui… —Un poema no debe ser una intenció… Entonces me mostró sus manos: no l…
Tres nobles reyes cruzan la albora… siguen el rastro de un fulgor bril… Sus ojos buscan al Señor nacido, guiados siempre por su luz constan… Camellos surcan las arenas frías,
Ardiente estación de Verano, tan… Cuando el sol derrama su fuego des… El calor se adueña de cada rincón… Y la naturaleza en su esplendor se… Los días se alargan, llenos de luz…
Pequeña flor recién nacida al mund… Tu llegada colma de luz nuestras v… Eres el milagro más puro y profund… Que llenará nuestros días de alegr… Tus ojos brillan con una luz divin…
No puedes ser faro si titubeas con cada ola, ni velar por los náufragos si también te hundes en su sombra. No puedes ser salvavidas en la pla…
Equivocarse es más que un tropiezo… es el sendero que el alma esboza, como la lluvia sobre la rosa, como el desvelo en el proceso. No hay destino sin su quebranto,
Aquella caricia se quedó suspendid… no rozó la piel, pero la sentí cer… como el viento que juega con la hi… y nunca la toca, pero la agita. Fue un roce apenas imaginado,
Aquel que da la vida, con manos que no se ven, me dio un corazón que late, y un alma que siente y piensa. Me regaló un cuerpo débil,
Cuando te encuentres sola en la no… Y la luna ilumine tu rostro de pen… Cuando sientas que el mundo te par… Y tu corazón late con pesar y vací… Entonces, acuérdate de mí, mi amad…
¡Qué triste que cae la lluvia! Suavemente cae sobre mi ventana Como lágrimas de dolor y tristeza Recordando un amor que se fue sin… Cada gota que golpea el cristal
A la luz de mis desvelos nacen cánticos de amor, que me llevan a tu cielo, como tu amo y tus señor . En tus brazos me consuelo,
Ahí va, cargando su solemnidad, un peso muerto que él llama arte. Cada paso, un golpe de gong, cada palabra, un eco hueco. El cigarro en la mano,