Se me ha derramado mi te Sobre la mesa de madera Un líquido oscuro y caliente Que me hace olvidar mis penas. Con cuidado y desespero
Contemplo el paisaje, en su silent… Colores que estallan, luces que de… Un espectáculo divino, una efímera… Que rápidamente se desvanece, cual… Las flores que hoy abren sus pétal…
El vacío grita en silencio, pero el corazón late aún. Los brazos, aunque vacíos, siguen meciendo recuerdos. Se es madre en cada lágrima,
Es el odio que el odio genera, una llama que nunca se apaga, un eco que en sombras espera y en cada rincón se propaga. Es la herida que nunca cicatriza,
Mi tierra, es tierra de gozo, Quisqueya linda, mi Quisqueya . Sus campos verdes, un vergel preci… Sus playas doradas, una maravilla… Sus montañas se alzan majestuosas,
No hubo aviso, nomás el trueno reventando la puerta del sueño. La ciudad dormía con la boca abier… y el plomo, como un rezo, la despe… Un vato corrió entre sombras,
El sol despierta, ilumina el cielo… trayendo consigo un nuevo anhelo. La vida renace, con bríos renovado… dejando atrás los pesares pasados. El canto de las aves, dulce melodí…
Cuando escucho de tu dicha, mi alm… Pues tu suerte quisiera para mí, q… El verde prado de otro, mi corazón… Mientras mi sendero en yuyos se en… Aquel que ríe alegre, fuego en mi…
Mi brújula, certeza en el andar, Mi melodía, canción de mi alma, Norte siempre en mi pecho morar. Mi poesía, palabras que fluyen cal… Emanando emociones, cual brisa pal…
El alma al vuelo, se torna suave, del tiempo anhelo que nunca acabe. La luna al cielo
Deseo inhalar tu aroma, tan pura y… Y rendirme a tu mirada sobre mí po… Poseer tu belleza, tan divina, Con un toque suave, que al alma ag… Tu presencia inunda mi ser de aleg…
Oh, abuelito gruñón, mi viejo amad… A pesar de tu gruñir, te adoro tan… Tu voz, un mandato, mi corazón ha… Y tus arrugas, un mapa donde guard… Aunque siempre refunfuñes, tu bond…
El tiempo pasa, incesante y veloz, dejando huellas que no puedo deten… Cada segundo que el reloj pronunci… es una oportunidad que debo saber… Debo tener tiento en mis pasos,
A la vida agradezco hoy, con fervor en el latido, por el amor compartido y el mundo donde estoy. En mi pecho crece, soy,
En la sombra de la brisa, se dormían los senderos, como arpegios pasajeros en un eco que agoniza. El rocío se desliza