Margarita Ferreras
Desgrano los días como granos de a… que se escurren veloces entre mis… El tiempo me roba, el tiempo me co… a aferrarme a segundos, huyentes y… Siento cómo las horas me muerden l…
De Andalucía a París, el viaje em… Dejo el Darro y el Sena me recibe… Las orillas del Louvre mi alma en… Mientras mi Granada en mi pecho v… El aroma de la violeta y el jazmín…
La poesía es fuego que arde en el… un eco profundo que nunca se va, es calma en tormenta, es dulce man… es luz que consuela, que vence la… Su fuerza infinita no tiene un dia…
Hicimos un dulce amor, sin clamor, Solo suspiros suaves, una fanfarri… De pasión intensa, que cual zaraba… Nos embriagaba con su hechizo flor… Sensaciones nuevas, jamás antes vi…
No vine del Big Bang, Ni de la explosión primordial. Soy algo más antiguo que eso, Más misterioso y original. Antes del tiempo y el espacio,
In echoes of your laughter’s dulce… My body falters, shattered into fl… Like Icarus, I soar too close to… Deluded by self-love’s pernicious… A phoenix rising from the fire und…
Oh canto que me llama desde el azu… ardiente melodía de un sueño inaca… en ti vibra el misterio de un mund… y en tus notas se eleva mi espírit… Eres fuego celeste que quema sin r…
Bajo el manto de estrellas brillan… susurros del cosmos, secretos flot… Cada destello, un verso en el aire… cada constelación, un sueño que ar… La noche se viste de gala y de can…
Madre, tú eres la flor más sencill… rosa sin espinas, blanca y callada… que abre sus pétalos en la orilla de un río manso al romper el alba. Tus manos tejen silencios hondos,
En la orilla del río, las piedras cuentan historias, susurros de tiempos lejanos, secretos guardados en la memoria. Las hojas danzan al viento,
Preludian los grillos mi felicidad… Su canto melodioso, un dulce son, Que llena el aire de serenidad, Y me transporta a un mundo de ilus… Sus notas suaves acarician mi oído…
En la quietud de un día primaveral… cuando la brisa acaricia los verde… surgiste ante mí, como una flor si… llenando mi alma de pétalos bordad… No te buscaba, ni te esperaba enco…
La ciudad late en ritmo de acero y… un corazón mecánico que late sin c… Ella, una flor en la grieta de la… un brote de esperanza en la selva… Sus ojos, dos mares que esconden t…
Mi tierra huele a viento, a corteza herida, a lluvia dormida sobre la piedra. Es un murmullo de olivos, una sombra alargada de pinos,
No sé dar ni una palma por bulería… ni marcar con mis pies el son gita… pero el duende me ronda cada día, me susurra su canto entre mis mano… El quejío me llama en la distancia…