En el abismo era la sombra, y la sombra era sobre la faz del a… Y el agua era oscura, y la oscuridad era sin fondo. Y el viento era un susurro,
En el corazón de la tierra, Un tesoro cultural se despliega, Llenando los espíritus de alegría, Un legado que el tiempo no niega. Arte y música, un tapiz vibrante,
La noche se quiebra con luz moribu… el alba despierta en un sueño heri… y el viento arrastra un lamento do… que entre sombras frías su voz se… Los campos aguardan la luz fecunda…
Tus ojos son un faro que alumbra m… destellos de un camino que guía si… en ellos halla calma mi errante co… y el mundo se transforma bajo su s… La noche se arrodilla al ver su cl…
Suspiro en la sombra, un eco que se pierde, una voz que se eleva y en el aire se muerde. Soy sólo un aleteo
Antonio Machado se inclina despac… en sus manos ofrece un verso senci… “Tus palabras,” susurra, “son flor… un farol encendido que alumbra el… Gustavo Adolfo Bécquer, con su al…
En el silencio de versos vacíos, Páginas blancas esconden su pesar. Incapaces de narrar el dolor que a… Sepultado en lo profundo, cual noc… Siete cerrojos protegen su corazón…
Se alza el aire, leve susurro, como un canto que nadie escucha. La tarde cae, sus hilos de oro tejen silencio en la hora justa. El mar, un pecho que no respira,
Eres ritmo en mi pecho, la cadencia suave del viento, melodía que me llama desde los rincones del tiempo. Eres canto sin palabras,
Tu beso, un don de cielo celestial… Ofrece paz y calma sin igual; Sus dones virginales, un manantial… Que nutre el alma con amor ideal. En celestial abrazo, bondad fluye,
Sentir la piel erizarse con un roc… descubrir el universo en una risa, desvelarse con la luna entre los l… y entender que el tiempo cede a su… Es vivir con la certeza del encuen…
Bajo el sol que besa las hojas, contemplo las olas del mar. Cada brisa que acaricia las ramas, me recuerda el ritmo del fluir. Las hojas se mueven con gracia,
Ahora que estás conmigo, miro el muro en silencio. ¿Rosa? ¿Qué eres rosa? ¿Un latido o un misterio? ¿Es suave como el susurro
El dolor se va, dura solo un día, viene la alegría, pronto brillará. Noche que se va,
No sé cómo, ni cuándo, me encontraste y te encontré. Un encuentro fortuito, que el destino nos brindó. Entre la multitud,