Invierno en tus brazos
Hablemos de amor, con la mente, espíritu y el corazón.
Escribe el poeta: poesía mía, nadie apagara este fuego de amor que siento por ti, porque de fuego está hecho, de cielo, de luna, de las estrellas, todo lo que ves, y la voz de Dios.
Ella: yo nunca te dejare, estaré en tus brazos toda mi vida. El amor que siento por ti, nunca se acabara guárdalo en tu cabeza mi Ángel.
Poeta: poesía mía, dame tu corazón, el mío ya es tuyo. Camina junto a mí, como los días en mi rostro, muera en mi como mis sueños. Abrázame con tu corazón poesía mía.
Ella: bésame que soy miel en tu paladar, rodéame con tus brazos desnudos. Quiero sentirme mujer de verdad, duerma en mis brazos quiero tenerte como un niño recién nacido. Mi vida eres lo mejor de mi vida.
Poeta: cerrad la puerta y las ventanas que no se escape el amor amada mía, poesía mía. Ciégame los ojos con un bezo apasionado tuyo. Mírame a los ojos, tómame de la manos y subamos al cielo, gritar nuestro amor a los cuatro vientos, y que lo ángeles nos vea besándonos con pasión.
Ella: tómame que la noche es inmensa, bésame porque mañana ya no será igual, quiero sentirme viva en esta noche iluminados de millones de estrellas. Llévame a donde vayas mi vida.
Poeta: corre mi poesía, que las estrellas han construido con su color escalera al cielo. Abrázame hasta tocar el cielo, sonríe que nos ilumina la luna.
Ella: si mi angelito, aquí tienes mis manos y mis labios bésame no quiero que mis ojos brille para el mundo entero, solo quiero que brille solo para ti… te amo con el amor que Dios me entrego para ti.
Poeta: poesía mía. Todo mi amor es tuyo, esta noche mis labios es mi regalo, amada mía eres la mejor en la vida… continuara…
