Es tan oculta como la luna en el día pero deja ver parte su encanto, para que cualquiera lo suficientemente valiente se adentre a conocerla, pero no crean que la tendría ganada, se necesita mucho más que la valentia para poder conocerla por completo, ni siquiera la astucia sería suficiente, porque tal maravillosidad no es para cualquiera se necesitan muchas cualidades y habilidades aunadas para poder conquistarla.

Quien sabe...
Tal vez ni siquiera ella misma conoce como podrían conquistarla, tal vez ella es ajena a lo maravillosa que es, tal vez sea una diosa que desconoce su existencia, tal vez su humildad la inhibe a aceptar la realidad de su encanto y tal vez solo tal vez alguien resuelva este dilema y llegue a consagrarse con ella.

Mientras tanto...
Admirarla de lejos, esperando ser ese alguien que llegue a conocer por completo su inefable encanto.

             —Eudrault L. Meus