Se olvidó de aquella gesta de la toma de protesta en Palacio Nacional, de la banda presidencial. Que le impusiera latente

Glorioso mil cuatrocientos noventa y dos el de vientos de mares, de tempestades, de célebres avatares. Épicos, en que marinos

López, en pleno empalago a Biden da su regalo de reyes como adelanto al “Chapito” y en espanto. Se torna la recaptura,

La violencia ya es el credo que impera en Nuevo Laredo cuatro soldados masacran a cinco jóvenes y se desmarcan. A decir la verdad se rehúsan,

El cielo se muestra vasto cuando llueve allá en Tabasco la refinería “Dos Bocas” traga agua como pocas. Se inunda con gran frecuencia,

Soy América excelencia, grandeza mi sello, esencia, soy un estilo de vida que, en el Azteca, anida. Fiel perfil firme linaje,

Es inmensa la ignorancia en cuatro “t” su fragancia, nuestra patria va al revés por los caprichos de Andrés. Que ha nombrado director

Pues, no tiene llenadera y su actitud no modera odio, división, emblemas, no resuelve los problemas. Ya desgració a la nación,