Vacío de fuego
Relámpago cruel la certeza de haberte perdido,
que le gana al de adictiva miel desvarío,
de creer en que de alguna forma mágica volverás.
Desolación devastada mi nombre,
certeza serena de que siempre serás mi hombre,
yo, fundida en tu crisol tornasol, lograré la eternidad.
Mi brazo derecho acoge a la frente acongojada,
sostén de mi alma, desierto de dunas mutantes,
no hay llanto lluvia que lo pueda coronar.
Renuncio a respirar porque está vacío de fuego nuestro lecho,
el que nos enseñó a procrear,
ahora alas débiles cobijan la lánguida memoria que no sabe anidar.
Sin fuerzas para sostener las flores que traía,
ya no puedo temblar ni sé llorar
y ahora desde arcos de rosas llueven pétalos sobre nuestros versos para dejarnos amar.
Imposible dejar atrás la gloria de la plenitud de tus horas en mi mirar,
de tu generosidad en mis deseos, de tus caricias en mi anhelo,
me convierto en la peonía bailarina que solo con tu soplo puede vibrar.
Eres mirada de soslayo que acaricia,
silencio cómplice que serena,
verdad llave maestra para mis puertas,
cofre tesoro de risas para mi soledad,
mentira valiente con mirada ausente, que sosiega,
brillante luz en mis rincones de tenebrosa oscuridad,
ilusión infantil de cosas nuevas,
deseo de seguir cuando ya no pueda,
lo más hermoso que he sentido,
el logro inmenso que he vivido,
el daño incrustado en el pozo más profundo
y lo que en la aurora me convertirá
en el siempre vivo ángel de dolor
que permita eterno nuestro amor,
única forma posible de mí que queda,
una vez llegado tu final.
Imagen de la escultura "The angel of grief" (1894) de William Wetmore Story (1819-1895, USA). Dejó la abogacía para convertirse en escultor y poeta. Este monumento funerario lo esculpió para la tumba de su esposa, Emelyn, a la que acompañó al morir 1 año después. La escultura se encuentra en el cementerio protestante de Roma, al no poder ser enterrados en el cementerio católico los protestantes, judíos, ortodoxos, así como tampoco los suicidas ni los actores. Más en https://historia-arte.com/obras/el-angel-del-dolor
Gracias a Wil, por sus sinceros consejos para mejorar lo escrito.
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