en el camino del Cigarro conocí al… en el camino, fumado por el Dios… conocí a alguien allá a lo lejos,… sin conocerme: y la sombra entre l… proponía la muerte de humo, la mue…
Tú, el que me lee ahora, eres un m… te retuerces como lombriz en la os… es tu paso ciego un tunel y un agu… pero en el sueño de la lluvia sale… eres cenizas en el corazón de un f…
Me visitaran, pero ya no estaré en esa casa.
A pesar de que las lluvias no dicen nada y de que todo es tan claro como au… pon tu profunda oscuridad en relie… dile letra al vientre de tu espejo…
Comencé tomando cada cajón de tinta o sea palabra y encerré para siempre, pedazo por pedazo
estás aquí difuminado con los ojos persistentes; imagínate, tras ellos, los pies de… la gravedad del vacío. estás aquí difuminado
El río tranquilo figura de nuevo tu cara sin sorpresa. Late tu corazón entre instantes. Todo ha pasado
Ah... El tren pasa y no deja de pasar. El tren. Llueve y no deja de llover. Lloverá.
...es ir descalzo hasta pisarse los mismos pies, los mismos callos, una y otra vez, con abejas muertas.
Que me hablen y que la magia muera en ese estéril río inacabable que es la lógica y la inteligencia… El cádaver de lo que no existe, ahogado nunca más vivo.
Rastro de tinta/ en el tiempo blanco de hoja/ en el blanco hoja de ausencia/ antes de que ausencia fuera Ausencia/
Un día estuve prisionero, era una costumbre volver muerto de… estaba como el viento está sobre l… invisible, pero amplio, extendido, pero suave.
un grillo, la noche; sentirme en casa aun sin estarlo, la guitarra, la cigarra en el árbo… la fogata, la noche, la noche, la noche,
El ruido es desolador—estoy más solo que en otros poemas. Me sacude la inmensa identidad del mundo: esto es, una presión que me comprime, deprime, suprime... La innegable obediencia de ...
Luego, por la tarde, las veredas d… Desatando del ruido las palabras e… en el tiempo que no para. En la tarde enmarcada donde se cru… pensando, decidiendo, entre mis pi…