#EscritoresMexicanos #Maltiempo (1972)
Trato de escribir en la oscuridad tu nombre. Trato de escribir que te amo. Trato de decir a oscuras todo esto. No quiero que nadie se entere, que nadie me mire a las tres de la mañana p...
—Estábamos en el paraíso. En el paraíso no ocurre nunca nada. No nos conocíamos. Eva, levántate. —Es de día, pero aún hay estrellas. El sol viene de lejos hacia nosotros y empiezan a g...
Nadie sabe el número exacto de los… ni siquiera los asesinos, ni siquiera el criminal. (Ciertamente, ya llegó a la histor… este hombre pequeño por todas part…
Dice Rubén que quiere la eternidad, que pelea por esa memoria de los hombres para un siglo, o dos, o veinte. Y yo pienso que esa eternidad no es más que una prolongación, menguada y pob...
He aquí que estamos reunidos en esta casa como en el Arca de N… Blanca, Irene, María y otras much… Jorge, Eliseo, Oscar, Rafael... Vamos a conocernos rápidamente
¿Qué putas puedo hacer con mi rodi… con mi pierna tan larga y tan flac… con mis brazos, con mi lengua, con mis flacos ojos? ¿Qué puedo hacer en este remolino
—Son los pájaros mismos que se hacen aire. Cantar es derramarse en gotas de aire, en hilos de aire, temblar. —Entonces los pájaros están maduros y se les cae la garganta en hojas, y s...
Mientras los niños crecen, tú, con… poco a poco te acabas. Yo te he ido mirando a través de l… por encima del mármol, en tu peque… Un día ya sin ojos, sin nariz, sin…
Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto tiempo, abstinencia, soledad....
Con la flor del domingo ensartada en el pelo, pasean en la alameda antigua. La ropa limpia, el baño reciente, peinadas y planchadas, caminan, por entre los niños y los globos, y charlan...
El mediodía en la calle, atropella… violento, desgarbado; gentes envenenadas lentamente por el trabajo, el aire, los motor… árboles empeñados en recoger su so…
Un año o dos o tres, te da lo mismo. ¿Cuál reloj en la muerte?, ¿qué ca… incesante, silenciosa, llama y lla… ¿qué subterránea voz no pronunciad…
No es nada de tu cuerpo, ni tu piel, ni tus ojos, ni tu vie… ni ese lugar secreto que los dos c… fosa de nuestra muerte, final de n… No es tu boca —tu boca
La casa me protege del frío nocturno, del sol del mediodía, de los árboles derribados, del viento de los huracanes, de las asechanzas del rayo, de los ríos desbordados, de los hombres y...
—Mamá, tengo la barriga llena de hambre, dice. Y la mamá ríe y le trae la leche. Al rato, ya dormido, se sobresalta y mueve los brazos y las piernas. La mano de la madre le acaricia...