Para Armando Zubizarreta
(1960)
#Asesinados #Peruanos #SigloXX
A estas horas, en estos días, estuve en Moscú, y desde mi piso 23 del hotel Ucraí… vi al río Moscu de noche y a una ciudad de noche
Mariposas, árboles calles angostas y venideras, ¡cómo decirles que a la hora del crespúsculo sus ramas vivideras volverán
Un eucalipto, alto, espigado, contiene para siempre mi corazón. Eucalipto, alto germen de la
Porque mi patria es hermosa corno una espada en el aire, y más grande ahora y aun más hermosa todavía, yo hablo y la defiendo
El valle de Tarma es grande. Pero más grande es mi corazón cuando lo miro,
Yo soy un río, voy bajando por las piedras anchas, voy bajando por las rocas duras,
Lentamente caminé‚ por la ciudad y por sus calles. Cálidas piedras sostenían mis zapatos,
primera pregunta “¿En qué lugar de Lima, la dorada… vivían los que la coristruyeron?” (Bertolt Brecht) segunda pregunta
Rafael, Alberti, déjame llamar a tu voz desde mi voz, a tu canto desde mi canto
Jueves, día último de la infancia Jueves, viernes días dulces y amargos para el oído qué sombra que luces
Nadie te molesta, hermano. Hoy duermes en tu cuna Y en tu leche, hoy duermes en tu sueño
Ha llegado ya el hombre de los mares Señor, abre tu puerta Señor, abre tu corazón que ha llegado ya
Mi cuarto es una manzana, con sus libros, con su
Mil países que yo no conozco mil est:rellas y túneles, mil países y pueblos,
No deseo la victoria. La victoria es siempre pasajera, no queda después sino la muerte, el regocijo, el gozo falso de la v… una hierba caída sobre el hombro,