Te tendiste de nuevo En estas largas soledades mías Para sufrir por siempre Mi tristeza. Ya no puedes fugarte
Desde que el primer hijo –en noche… Se desprendió de ti como un brazo… La carne se te ha hecho una fruta… Y el amor como un pan se te ve y s… Tus mejillas se han vuelto suaves…
Tierra fresca y mojada, Tierra seca y ardiendo, Te he de llevar amada, Te he de llevar sufriendo. Te he de llevar prendida
De tierra fresca eres: en la noche Me hueles a terreno trabajado. Tu olor de tierra en celo se me ac… Y me navega el cuerpo como un barc… Olor a entraña viva, a tierra jove…
Sufro tanto que a veces ni siquier… Sé si sufro por mí o por el obrero… El sufrimiento nace, simplemente. Es como un árbol ciego. No lo busco, lo llamo ni lo aguard…
Tengo triste la boca. El cuerpo.… Nada cambia en la tierra sin embar… El lodo amarillento siempre es lod… Y el camino más largo es el más la… Duele mucho encontrarse uno tan tr…
Uno quisiera siempre tener su mano… Su buen pan compañero, su dulce ca… Amigo inseparable para cada moment… Quisiera no encontrar un solo frut… Una casa sangrando, un niño abando…
No acostumbro a decir amo, te amo, Sino cuando el amor me inunda todo Desde los ojos hasta los zapatos. Mi cuerpo es una sola verdad y cad… Resume una experiencia de entusias…
Los lechos son países deliciosos Donde sólo los seres elegidos Se pueden madurar. Desconocidos Se levantan de ellos los esposos Que los dioses protegen: silencios…
¡Qué ganas de llorar sobre la cama… ¡Qué ganas de gritar sobre la almo… ¡Qué ganas de sentir que tú me lla… Como llama una niña abandonada! ¡Qué ganas de decirte en el oído
Qué duro estar prensado sin remedi… Entre los muebles tristes de la pe… Sacar de todas partes tedio y tedi… Como un innumerable mar de arena. Qué duro ir por la vida haciendo s…
Para este amor que entre ella y yo… Y entre los dos cuidamos y crecimo… Y entre los dos también alimentamo… Un poquito de sangre te pedimos. Corre dulce y alegre por la acera
Hoy mi vida no tiene peso alguno: Es un viento, menos que un viento, Menos que una raya de luz. Ahora ninguno puede serme oneroso. No hay terrenos resquemores debajo…
La noche, deseosa, apenumbrada, Te quitó sin pensar las zapatillas… Y –por sentirse blanca y alumbrada… Desnudó blancamente tus rodillas. Luego –por diversión, sin decir na…
Mujer, toda mi sangre está present… Contigo en esa lucha que sostienes… Contigo está mi amor incandescente Y en tu llanto y tu duelo me conti… Nunca en la vida estuve tan de pri…