#Cantautores #Mexicanos
Este es el corrido del caballo bla… que en un día Domingo feliz arranc… iba con la mira de llegar al Norte… habiendo salido de Guadalajara. Su noble jinete le quitó las riend…
Me voy por el camino de la noche dejando que me alumbren las estrel… me voy por el camino de la noche porque las sombras son mis compañe… Te quiero y no me he dado por venc…
Despacito muy despacito, Se fue metiendo en mi corazón, Con mentira y cariñitos, La fui queriendo con mucho amor. Despacito muy despacito,
Podrás tener mucha suerte, podrás andar por el mundo destrozando corazones, podrás hacer lo que quieras, podrás tener mil amores,
Voy a morirme solo, sin molestar a nadie; voy a morirme lejos, cuando mi amor se acabe. Desesperadamente,
Qué bonito y qué bonito es andar en la parranda a la luz de las estrellas y al compás de las guitarras, disfrutando de la vida
Cantinero que todo lo sabes, he venido a pedirte un consejo pero quiero que tú no me engañes, no me digas que no eres parejo. Ya tomé mil botellas contigo
Con la mitad del cariño que yo te… podrán hacerte feliz, con la mitad de los besos que yo te daba la vida entera podr… con que te quieran tantito
Es inútil dejar de quererte, ya no puedo vivir sin tu amor; no me digas que voy a perderte, no me quieras matar, corazón... Yo qué diera por no recordarte,
Estoy en el rincón de una cantina, oyendo una canción que yo pedí, me están sirviendo ahorita mi tequ… ya va mi pensamiento rumbo a ti. Yo se que tu recuerdo es mi desgra…
Ahora que tengo dinero que pueden decirme que todo me sob… sé que la suerte es primero que con el dinero no todo se compr… Siento que no soy el de antes
No fueron en vano mis ruegos la vida ha querido que al final de cuentas tus besos sean para mí. Que triste quedé aquella noche
Cada quien agarró su camino, cada quien escogió su estrella y la suerte de nuestro amor la jugamos en una botella, porque estaban marcadas las cartas
Por praderas, montañas y valles voy huyendo como un criminal, añorando el pueblito querido que tantos recuerdos me supo dejar… Maldiciendo el amor y mi suerte
Amanecí otra vez entre tus brazos y desperté llorando de alegría; me cobijé la cara