#EscritoresEspañoles
Como dos ciegos pájaros que no te conocieran, mis manos se levantan sobre toda la tierra y en lo oscuro Te buscan
Todas las cosas son las mismas que ayer estaban en mi orilla: tierra inmutable y poderosa, cielo sereno y hondo arriba, piedras heladas donde el tiempo
Los siglos ponen huevos sobre su l… en la dura corteza donde la luz se… y el día retrocede igual que ante… donde se encierra el tiempo lleno… Pero otra vez los siglos
Cuando los ojos de Dios se abren, amaneciendo por la tierra, y, sobre el mundo de los vivos, se derrama su transparencia, yo abro los míos para todo,
Acércate. Más, más, hasta palpar mis sueños. No, todavía no... Aún más y más, sin miedo: como el agua del mar
Ha llegado la noche para todos: yo reclino la frente en esta piedr… donde los siglos ciegamente pasan, mientras fulgen, arriba, las estre… Entre duros peñascos me arregazan
Arde, en la noche, la belleza de las cosas que no se ven, y la ceniza se derrama sobre el silencio de su ser. El Dios oculto que nos vela,
Clamores desde el fondo. Se crispan las palabras como serpi… como aullidos que salen del crujir… y se vuelven de acero llorando ant… Y sobre todo esto:
Yo tengo un lazo azul todo de seda. Mamá me lo compró en una tienda. Yo tengo una flor blanca
Cantemos a las flores que hay sobre la hierba, ya el sol nos ha traido toda la primavera. Mi falda corre,
Que es la noche de Reyes duérmete pronto, ya se oyen sus caballos bajo los chopos. Duérmete, hijo, duerme
En esta humilde carne que me has d… has de cavar, Señor, mi sepultura, y ha de nacer la yerba, una mañana… en la tierra desnuda que la cubra. El viento ha de pasar, como ahora…
SU madeja de yerba el viento ovil… en el hueso silencioso de las asta… mientras una triste saliva amarra… su mansedumbre de nube solitaria sobre un verde paisaje de tristeza
La luna estaba en el cielo como un sexo bajo falda. Dos gruesos arboles eran sus muslos de copas blancas. Los arroyos le ponian
...Y no te querrán los ángeles si continuas llorando. No bajaran cuando duermas a limpiarte los zapatos. Mañana por la mañana