No, se cuanto tiempo llevo sentado en este tren
no, se ni en realidad que estoy intentando se hacer.
me tortura, ver los campos de maíz por la ventana
pero aun mas me tortura la voz de
alguien a mi lado que no cesa de hablar de una desconocida
berenicce.
En realidad no me interesa saber de su historia
de amor, tengo mi propia historia de amor, en realidad
no tengo culpa, todas las historias de amor, son dulces, pues
hoy seré vela y tinta y mi propio sello lacre.
Amor de mis penas, sonrisa del tímido, mirada de la inocencia
fruta del paraíso, brazos de la madre primeriza, enloquecí al escuchar
tu voz gritando mi nombre esa noche, tu color perla, se apocaba, mi agonía era mas grande al verte tendida entre impíos, te abrace, tan fuerte que sin dudar
tuve la paz de esta vida.
Desgarre mi alma, por volverte a tener entre mis sabanas
y escribir una nueva novela erótica.
fuiste y seras mi musa inspiradora, mi guitarra sin cuerdas
mi claro de luna, mi arroyo tranquilo, mi brisa en en la pradera
mi lluvia en el rostro, mi canción de cuna.
No tengo la culpa que el amor doliera tanto, tanto como un corazón enfermizo como un joven ilusionado, y no correspondido .
desconozco la virtud de tus deseos, pero reconocería a kilómetros
la fragancia de tu pelo .
cabellos blancos como la espuma del mar, ojos marrones como la corteza de roble; labios rojos como las mismas llamas del pandemonio.
Te quise tener entre brazos por ultima ves, pero que orgullo de esta vida, donde la belleza es efímera y la vida es una ruleta contra el tiempo.
Tan corto es el tiempo como toda cascada al cercase terminara en una gota .
no habrá Romanée conti que me deje olvidar este invento que se llama amor .