Algún tanka
Estoy sentado en la tarde silencio… como un mártir de niebla, como un… con este viento triste—¡ay, este v… que lame mi frente con lenguas de… Esta tarde,
Hace frío y mis ojos se cierran lánguidament… Hace frío pero en el pecho arde silencioso e…
Quien fuera un lago profundo, sólo eso, un lago tranquilo y profundo. Adormecido a la sombra taciturna d… Reflejar el azul de la aurora
¡Oh, sí! La nostalgia es un vampi… que bebe de mis venas con lentitud… Un viejo dolor—ese felino de sombr… se despereza en mis costillas, y yo, pobre mendigo de espejismos,
Pensando estoy en ti... ebrio de amor y de ternura, de la miel que me das oh niña de b… Cautivo estoy de tu temblor, de tus suspiros.
Cuando la queja verde de tus hojas… Aumenten la algarabía de mi pecho, Y el espacio tempestuoso evoque El gorjear de un pájaro que vuela. Yo surcaré con mis ojos
Llegaste a tiempo para unirte al canto de las abejas que también buscan la luz, en esta fría oscuridad.
No supe qué más decir, ni qué escribir. me quedé con la nostalgia de su tr… de su rabia, de su queja. Unas gotas de lluvia humedecieron…
Dónde estabas, cuando aún yo jugab… Cuando el sol me besaba en el huer… Mientras cantaba persiguiendo mari… No estarías tú también en el vient… No estarías tú en el pensamiento d…
Flámulas del viento, divinas palab… cual vago rumor sin sentido, que rasgan el aire y se confunden en la tenebrosa noche del olvido..… El pabilo, trémulo arcángel de la…
Entre los versos lánguidos el silencio de tu presencia... afuera, aun no amanece, pero en el pecho, el sol calienta… del desierto infinito
Marzo soleado; afuera vuelan las mariposas, y al canto del arroyo un suspiro se eleva en oración.
El tintineo sutil de las campanas y el sol en lo alto. Es hora de la salmodia. el silencio estentóreo calma mis bulliciosos pensamientos…
De madrugada, aun no se desperezan los pájaros; la salmodia empezó hace rato... Dios permanece callado y el corazón sigue esperando.
El claustro oscurecido por la noch… el frío congela las lágrimas que s… la ternura invade el pecho; y un verso tímido se escapa escond…