#EscritoresCubanos
Alrededor de una perla Que el mundo ostenta en su seno, Como divino presente De las manos del Eterno; Hay dos aves de rapiña
Coronada de vivos resplandores Luce la tarde en el azul del cielo… Va tendiendo la noche su ancho vel… Y en el Ocaso se sepulta el Sol. Su veste de esmeraldas pliega el c…
¿Quién no le rinde culto a tu herm… Y ante ella de placer no se enajen… Si hay en tu busto líneas de escul… Y hay en tu voz acentos de sirena? Dentro de tus pupilas centelleante…
Perdió mi corazón el entusiasmo Al penetrar en la mundana liza, Cual la chispa al caer en la ceniz… Pierde el ardor en fugitivo espasm… Sumergido en estúpido marasmo
¡Quisiera, noble hermana, prender en los encajes del verso y de la prosa, el alma triste, arcana, sutil y misteriosa
Noemí, la pálida pecadora De los cabellos color de aurora Y las pupilas de verde mar, Entre cojines de raso lila, Con el espíritu de Dalila,
Abierta al viento la turgente vela Y las rojas banderas desplegadas, Cruza el barco las ondas azuladas, Dejando atrás fosforescente estela… El Sol, como lumínica rodela,
Luz fosfórica entreabre claras bre… En la celeste inmensidad, y alumbr… Del foso en la fatídica penumbra Cuerpos hendidos por doradas flech… Cual humo frío de homicidas mechas
Víctimas de cruenta alevosía, Doblasteis en la tierra vuestras f… Como en los campos llenos de simie… Palmas que troncha tempestad braví… Aún vagan en la atmósfera sombría
¿Eres dichoso? Si tu pecho guarda Alguna fibra sana todavía, Reserva el don que mi amistad te e… ¡El tiempo de apreciarlo nunca tar… Mas si cruel destino te acobarda
En el verde jardín del monasterio, Donde los nardos crecen con las li… Pasea la novicia sus pupilas Como princesa por su vasto imperio… Deleitan su sagrado cautiverio
Agoniza la luz. Sobre los verdes Montes alzados entre brumas grises… Parpadea el lucero de la tarde Cual la pupila de doliente virgen En la hora final. El firmamento
Rasgando las neblinas del Inviern… Como velo sutil de níveo encaje, Apareces envuelta en el ropaje Donde fulgura tu verdor eterno. El cielo se colora de azul tierno,
Monstruo de piedra, elévase el cas… Rodeado de coposos limoneros, Que sombrean los húmedos senderos Donde crece aromático el tomillo. Alzadas las cadenas del rastrillo
Al resplandor incierto de los ciri… Que, en el altar del templo solita… Arden, vertiendo en las oscuras na… Pálida luz que, con fulgor escaso, Brilla y se extingue entre la dens…