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Todo aquello que nunca he escrito

Te veía venir por aquellos largos pasillos,
 
Pasillos que recuerdo como si fuese ayer,
 
En aquella caliente ciudad en la cual inoportunamente,
 
Encontré,
 
Lo que no estaba buscando,
 
Entras en mi vida,
 
Con las cartas y el ombligo boca arriba,
 
Con los brazos muy abiertos,
 
Como si esas noches
 
Nos ofrecieran barra libre de sexo y cariño en tu pecho,
 
Y así, con las manos llenas de tanto,
 
Tanto que me haces sentir que es el mundo quien me está tocando,
 
Mil mareas corren por mis piernas,
 
Mareas llenas de gusto y pasión,
 
Mareas que nunca habían estado en este mundo,
 
Te sientas,
 
Me miras y susurras aquella frase que hace que aquel mundo se inunde aún más,
 
Frase que aumenta el ego y las ganas de este mundo brillar,
 
Y no dudo en contestar sinceramente,
 
Solamente susurro y no dudo en avisarte que no llevo ropa interior,
 
Pero,
 
Mi piel siempre ha tenido una gran armadura,
 
Armadura que nadie había podido cruzar,
 
Hasta aquel día que te vi por aquel pasillo pasar,
 
Tumbas mi armadura y besas uno a uno los planetas que rodean mi cuerpo,
 
Y cuentas uno a uno,
 
Cada segundo que te quedas en mi cama,
 
Y solo añoro que el tiempo no se termine,
 
Que nunca acabe,
 
Y luego entiendo,
 
Que sucederá muchas veces mas,
 
Que mi mundo seguirá inundándose de solo verte,
 
De solo escucharte,
 
Por qué, de solo recordar tu voz, escuchar tu voz,
 
Hace que este mundo lleno de constelaciones y planetas se llene de
 
—estrellas—
 
Le damos la vuelta al mundo,
 
Tardamos, pero queremos volver,
 
Y entras y sales cuando quieras de él, siendo cualquiera,
 
Pero sabiendo que no eres un único cometa,
 
Por que te gusta aquella libertad que mi mundo te hace sentir,
 
Y a mi me gusta sentirme libre a tu lado,
 
Me gusta tu verdad,
 
Me gusta volverme cierta a tu lado.
 
Tienes los ojos mas bonitos, ojos que quiero que miren arder este mundo,
 
Posees una risa capaz de rescatar el país, que digo el país, este mundo,
 
Y una mirada que sabe soñar, que sabe querer y que sabe curar,
 
Soñar con los ojos abiertos,
 
Y de repente,
 
Pasa,
 
Sin esperarlo nunca ha pasado,
 
No te has ido y he analizado las múltiples opciones de que abandones el mundo que nos rodea,
 
Y ya te echo de menos,
 
Acabo de besar cada parte de tu maravilloso ser,
 
Y mi saliva se multiplica queriendo más,
 
Sintiendo como se estremece cada parte de mi ser al tenerte cerca,
 
Pero,
 
Cruzas la puerta
 
Y ya me relamo los dedos para guardarte,
 
Por unas horas...
 
Paseo por esta oscura ciudad y te quiero conmigo en cada esquina,
 
Quiero contigo en cada esquina...
 
Si estas palabras son la acción,
 
Entonces ven a encontrarme en mi interior,
 
Por qué quiero hacer contigo,
 
Todo aquello que nunca he escrito.

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