Cada día, a la hora invariable, el niño veía al viejo pasar con la carretilla. El infeliz anciano se ganaba la vida arreando botellas rotas en su carretilla hasta que alguien, nadie sup...
—Ya nunca blandiré palabras ni emo… Me iré a dormir muy lejos del jard… Transformaré mis armas: las fundir… me haré yo la medalla para grabar… ¿Por qué me anduve siempre fijando…
El niño salta la cuna, con leche tibia se desayuna, se va a la escuela
. DRAMATIS PERSONAE ————— EL BARÓN DE DIEDRICHT, que… SU HIJO (éste escucha paciente…
Ese pacto final entre las luces y el ojo, el órgano impaciente, raíz del ver (¡el mundo, multitude… ¿de qué vale? Al fin nunca podemos
Jardines y jardincillos... Un astro rojiamarillo salta la verja
Acuérdate, Señor, del hombre humi… al que no dejan vivir sobre la tie… Mira sus esperanzas: las ha posado… No dejes ser tu mundo confín de la… ánfora hueca, vacía de Principios.
Usamos el marfil del intelecto para hollar la frontera en que exi… trajinar que lo hacemos..., que lo… cuando fuimos en pos de lo perfect… De nada nos sirvió el ángulo recto…
Dijo mi padre: “Hay hombres noble… pues dan el alma con la sonrisa a cada prójimo, y la existencia la llenan toda de poesía”. Dijo mi padre: “Y hay hombres hos…
Por lo chato del mundo, por lo vulgar, hablan solos los sabios, dedo pulgar. El discurso del necio
—Cantores fuimos, y tuvimos un corazón... Cantores fuimos. También a nosotros nos tocó vivir,
Abrieron todas las puertas del cielo. La noche entró con ligero vuelo. ¡Mírate! ¡Mírate!
Yo, que no tuve nada... un hombre… el mineral que abona los caminos, arrebol trastornado, sementado: escribo. Yo, que no tuve nada... ¡Oh alaba…
Lo vieron recoger papeles viejos y estamparles su firma, con un tra… claramente impreciso, tosco el bra… que perdiera, de antaño, los refle… Aleve trabazón de los espejos,
41 En este mundo traedor nada es barato ni caro, todo es según el grosor del bolso con que has comprado