¡Ojos tuyos! Ojos negros, que el… Pupilas que se dilatan ante la azu… Astros donde la luz se ennegrece para que haya estrellas en la clar… Viajeros en que el polvo de la Ví…
La América fue tuya. Fue tuya en… embrujada de plumas del cacique Ag… que traía el misterio de una noche… y quemóse en el rayo de sol de una… El África fue tuya. Fue tuya en l…
Bella ficción de reinas y de reyes… Oh, carnaval, alegre carnaval, que unces tus yuntas de mejores bu… y aras la carne en el vaivén del v… Arado quo revuelcas corazones,
No sé si danés o ruso, genial cuentista relata que en el nido de una pata la hembra de un cisne puso. Y ahorrando las frases de uso
Niño, de noche lanzábame a la selv… acompañado del negro viejo de la h… y cruzábamos juntos la manigua esp… Yo sentía el silencioso pisar de l… y el aliento tibio de sus bocas ab…
Guíñale al sol la cabaña. El río es brazo que se pierde por entre la manga verde que cuelga de la montaña. El yerbazal se desbaña.
Mi gallo ama el bosque umbrío de la verde cordillera y la caricia casera de la hamaca en el bohío. Cuando lanza su cantío,
Gallo que los tiene azules, es el que los sueños míos ensueñan en desafios que el campo tiñan de gules. Que su plumaje de tules
Mata de plátano, a ti, a ti te debo la mancha que ni el jabón, ni la plancha quitan de encima de mí. Desque jíbaro nací
Oh, los anhelos de ml amor insanos… Quiero empañar tus límpidos crista… y ver palidecer esos corales sobre las perlas de tu boca ufanos… Quiero que llore, herida en sus ar…
Ensueño que estoy cenando y que tu espalda es mi mesa, acostada su blancura, como en la playa te viera nadando sobre la ola
¡Pancho Ibero! Tronco de honda ra… y encarnación de la América españo… Una ola te trajo a las playas de… ¡Pancho Ibero! ¡Bendita sea la ol… Tramas la dictadura, pero armas la…
Linda rubia: las otras lindas rubi… saben que tú eres la más rubia ent… ¿De qué áureos medievales, de qué… de virreinos en flor, de qué moned… por el roce de siglos derretidas,
Deja, jibarita blanca, deja que el jíbaro cante y que a medianoche suba la Cuesta del Asomante. Deja que el jíbaro cante,
Como medialuna blanca en la medianoche negra, tu blanca piel es la lumbre que aluza mi hosca tristeza. Tu piel le reza de noche