El sabio estima a todos, porque cada persona tiene una virtud.
Dé camino a la sorpresa y la novedad. ¡¡Sorprenda gratamente a los suyos… cada día!!
En los grandes aprietos es bálsamo para el alma hallar un buen corazón.
El tiempo tiene su labor en el telar convulsionado del tiempo.
He adornado un pequeño altar. Allí arden viejas hojas de laurel aromatizando el ambiente
Futuras generaciones construyan su nido en el árbol del porvenir. Las águilas en sus picos
Vive para crear no solo para existir.
Desde la distancia... observo un carruaje llevado por alados cisnes
Mi prisión repleta de jaurías de lobos furios… se convirtió en coloridas aves de dulce cantar.
Las buenas palabras deben ir acompañadas de buenas obras.
No vayas tan rápido goza de cada momento feliz de a poco.
Movía su rueca mágica mientras cantaba himnos angelicales.
Son carruajes llevados por cisnes alados relucientes y blancos.
La felicidad se va formando de pequeños momentos de alegría.
Fuente de hermosas aguas y verdes juncos... ¡¡Heme aquí!!