Como arreciaban más las olas, y la… seguía en su costumbre sin aviso, asomé a la terraza mi aprensión, y… ya no veía el faro y perdíamos pie e íbamos zozobrando aguas abajo, b…

Estaba abierto el cielo y mi hijo… tan indefenso y tibio y aterido y… que lo sentí una obra sólo mía, vi… de un cuerpo paso a paso ofrecido… Lo envolví con mi aliento y él tuv…

Comienza a serme infiel la piel de la garganta; pero ahora que se pierden tras de… tómame una vez más, mi desdeñoso a… mientras las algas ponen

Escucho las campanas del puente de… septiembre es mes de tránsito y un… a llamarme a las islas, o el cuart… lentamente. ¿Quién parte junto a los marineros o quién roza…

Quizás no sea ternura la palabra p… para este cierto modo compartido de quedar en silencio ante lo bell… o de hablar yo muy poco y ser tú l… misma, su emblema, aunque tan próx…

Me despoja de mí el silencio en la… que una llave de piedra o de plata… y a las veras del agua se desnuda… y nácar la nostalgia. Deja escurri… una gota de aroma que sacude a la…

¡Qué me intenta decir tu deterioro… muñeca frágil y doliente y herida, sin faldones que cubran tu cuerpo… sin un alma mecánica que te cubra,… de los años y el trato.

Cóncavas piedras vienen a recibir… con un frescor que acepta mi mano… Guardo turno en el húmedo corredor… doy paso a las rameras y al ajuar… Públicamente expongo al agua mis r…

Cada noche te espero desde antes d… y cuando sobrevienes, agregada pre… a mi quehacer, pareja de topacios… contra la piedra azul serena de lo… dócilmente interrumpo mi sueño y,…

Porque te fue negado el tiempo de… tu corazón descansa tan ajeno a la… Tu sangre y carne fueron tu vestid… y la tierra no supo lo firme de tu… Aquí empieza tu siembra y acaba ju…

Bajo mi cama estáis, conchas, alga… comienza vuestro frío donde acaban… Rozaría una jábega con descolgar l… y su red tendería del palo de mesa… de este lecho flotante entre ataúd…

Si ves Moldava abajo, río abajo —frente a la Isla de Kampa y el M… un cubo de basura tiernamente meci… dulcemente mecido hasta el agotami… no pienses en el cuerpo de Ofelia…

De un espeso tejido me rodea tu mu… por todos los contornos. Me abarcas como un pecho abierto a… como una gran maroma que en surcos… Has llegado a cubrirme, definitivo…

Llegué cuando una luz muriente dec… Emprendieron el vuelo los flamenco… el lugar en su roja belleza insost… Luego expuse mi cuerpo al aire. D… hasta la orilla un suelo de dragon…