UN DÍA ELLA...
Un día mi mamita me dolió profundo,
soltó la soga que sostenía a mis ojos
y me dejó mirando, desde una ventana,
su tiniebla y sus antojos.
Un día mi mami me dolió profundo,
con su besito forzado y una sonrisa antojada
me mando buscar unos clavos al mercado,
y en mi regreso, el silencio de la puerta gritó lo que ella buscaba.
Un día mi mamá me dolió profundo,
me dejó sólo encerrado en una casa que olía a mujer débil... rara.
Mujer a quien yo desconocía
y sentado en un rincón de mi cabeza, no dije nada... nada.
Un día mi madre me dolió profundo,
las paredes en el cuarto de yeso antiguo me explicaban...
y de pronto el sol para mí ya no salía, pero afuera la gente sudaba,
mas la lluvia no caía, cuando en la calle el agua corría... el agua corría.
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