En espera del amor
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Morena de mi alma Porque no me dejas Que mire tus ojos Cuando te vea llegar. “Mirarte esa angustia
Yo visitaré a mi amante, Donde mi cuerpo a solas, Hará de su ser fragante Empezando por la Rosa. Yo visitaré la compañía,
Porque de los grandes maestro apre… Del corazón que enciende la llamar… Y los sentimientos fluyen como agu… Dentro de las venas del poeta: ¡qu… Porque dentro de el se encuentra u…
Desde mi viejo rincón, donde yo me siento puedo ver a mi amada con su alma pura para darle amor
Me he hecho la pregunta? todo los… De el por qué se deja de querer, Y aún, si quisiera poder averiguar… Tardaría siglos para poderlo enten… Es como sentir el alma, y sentirla…
¿Por qué razones? ¡Dime, ya no te visualizo como antes! Si aún te huelo, en la superficie esa piel, que perfumada tu gracia de mujer... me hicieron llegar ama…
Dejando aún lado los motivos de mi llanto, procedo a la manera correcta de reír, entendiendo por esto que la risa no ingrese en el escándalo, ni que insulte a la sonrisa con su torpe se...
Cuando estoy solo en mi cama, por… Los pájaros no cantan, ni los árbo… Las cosas se siente con calma, se… Como una idea propia, que se apode… Cuando me siento en mi cama, por l…
Que me perdone tu amor Que me perdone a conciencia Porque no soy un fantasma Que ignoras con indiferencia. Que me perdone tu amor
Sigilosamente Mi día tiene desencanto En el balcón Contempló la mañana. Hasta agotar
Coseche una rosa blanca La sembre desde enero Para el amigo sincero: Le dejo de mi rosa franca. Y para el que me arranca
Mente serena y fría Abren los ojos libre al pensamient… Retiran las sombras que ciega Mis ojos. Entonces más claro, tengo
A unos ojos hermosos y cansados del placer juvenil, de la vida, que se sienten únicos y amados sin alguna esperanza perdida. Ojos apasionados, ojos llenos
Siempre yo amándote, Yo soy quien soy, Sombra del primer día En que primero vine Para llegar a tu vida
No busques tras ese agonizante amo… La llama que extinguida muere, Tras la vida fatal y la cruel jorn… Que impuso los pasos del adolescen… Ni tras los ojos rojos melancólico…