#EscritoresEspañoles #Generación27
Sólo quien ama vuela. Pero, ¿quié… que sea como el pájaro más leve y… Hundiendo va este odio reinante to… quisiera remontarse directamente v… Amar ... Pero, ¿quién ama? Volar…
Atraviesa la muerte con herrumbros… y en traje de cañón, las parameras donde cultiva el hombre raíces y e… y llueve sal, y esparce calaveras. Verdura de las eras,
¿No cesará este rayo que me habita el corazón de exasperadas fieras y de fraguas coléricas y herreras donde el metal más fresco se march… ¿No cesará esta terca estalactita
Por fin trajo el verde Mayo correhuelas y albahacas a la entrada de la aldea y al umbral de las ventanas. Al verlo venir se han puesto
Pintada, no vacía: pintada está mi casa del color de las grandes pasiones y desgracias. Regresará del llanto
Dos especies de manos se enfrentan… brotan del corazón, irrumpen por l… saltan, y desembocan sobre la luz… a golpes, a zarpazos. La mano es la herramienta del alma…
El sol, la rosa y el niño flores de un día nacieron. Los de cada día son soles, flores, niños nuevos. Mañana no seré yo:
Carne de yugo, ha nacido más humillado que bello, con el cuello perseguido por el yugo para el cuello. Nace, como la herramienta,
¿De qué adoleció la mujer aquella? Del mal peor: del mal de las ausencias. Y el hombre aquél.
Sobre la roja España blanca y roj… blanca y fosforescente, una historia de polvo se deshoja, irrumpe un sol unánime, batiente. Es un pleno de abriles,
Te has negado a cerrar los ojos, m… abiertos ante el cielo como dos go… su color coronado de junios, ya es… alejándose a ciertas regiones matu… Hoy, que es un día como bajo la ti…
Fue una alegría de una sola vez, de esas que no son nunca más igual… El corazón, lleno de historias tri… fue arrebatado por las claridades. Fue una alegría como la mañana,
Te me mueres de casta y de sencill… estoy convicto, amor, estoy confes… de que, raptor intrépido de un bes… yo te libé la flor de la mejilla. Yo te libé la flor de la mejilla,
El cementerio está cerca de donde tú y yo dormimos, entre nopales azules, pitas azules y niños que gritan vívidamente
Naciones de la tierra, patrias del… del mundo y de la nada: habitantes perdidos y lejanos más que del corazón, de la mirada. Aquí tengo una voz enardecida,