#EscritoresArgentinos
Estoy aquí, parado en el centro de… Aquí donde la tierra ama todos los… Parado como una flor en la estació… canto y mi poesía es una voz entre… Llegué hasta aquí
Verdad hiriente la verdad de unos labios enamorados. Allí donde la noche desanima a los pequeños pobres taciturnos
Llegué una tarde a Madrid y me di… Ésta será mi tierra éste mi pueblo… Después fue todo mucho más difícil… Los apretones de mano del principi… se transformaron en fuertes tenaza…
A veces tengo los ojos contra las nubes sólo quiero volver a la ciudad. Bajo desde las alturas ciudadanas… me dejo caminar por la calle Princ…
Esperaré intranquilo creyendo que todo sucederá. Seré valiente pensaré que la muerte es inevitable.
Monté un caballo de carrera y comencé a galopar. Cuando el pobre caballo cayó muert… tracé una línea en la tierra y dij… Hasta aquí llegó el hombre
Frutos y ópalos nevados para mi ni… Madre entre sueños aparecía y desa… Siempre recordaré aquel perfume de… Algarabía y viento sus cabellos pe… Yegua del oprobio ato a tus ancas…
Hoy como nunca amé mi cuerpo en soledad. Hoy como ayer fui el amante infernal. Hoy no llegué muy lejos.
Él era mi padre y caminaba siempre unos pasos delante de todas las mujeres. Yo era su hijo y lo reconocía siempre
Un hombre solitario no es un hombre pero un hombre que construye semejante soledad
Partí de Buenos Aires a caballo de las palabras donde la poesía construyó su residencia. Mil días y mil noches
Dejar olvidar de a poco el que soy. Hundirme lentamente en las horas de la noche
Soy un hombre buscando su identidad perdida. Ambiciono con violenta pasión aquellas tardes cuando caminando por la calle
Nos anunciaron que después de la muerte llegarán para. habitar nuestra propia casa los monstruos.
Sin buscar sentidos sin buscar sentidos a veces no se puede vivir. Buitre acostumbrado