Ay no quieres, te asusta la pobreza, no quieres ir con zapatos rotos al mercado

A veces te hundes, caes en tu agujero de silencio, en tu abismo de cólera orgullosa, y apenas puedes volver, aún con jirones

Del follaje erizado caíste completa, de madera pulida, de lúcida caoba,

Amor, hagamos cuentas. A mi edad no es posible engañar o engañarnos. Fui ladrón de caminos,

Si tu pie se desvía de nuevo, será cortado. Si tu mano te lleva a otro camino se caerá podrida.

Quiero saltar al agua para caer al…

Del aire al aire, como una red vac… iba yo entre las calles y la atmós… en el advenimiento del otoño la mo… de las hojas, y entre la primavera… lo que el más grande amor, como de…

Se van rompiendo cosas en la casa como empujadas por un invisible quebrador voluntario: no son las manos mías,

«Vendrás conmigo» —dije—sin que na… dónde y cómo latía mi estado dolor… y para mí no había clavel ni barca… nada sino una herida por el amor a… Repetí: ven conmigo, como si me mu…