De Versos de salón, 1962
#EscritoresChilenos
De estatura mediana, Con una voz ni delgada ni gruesa, Hijo mayor de profesor primario Y de una modista de trastienda; Flaco de nacimiento
No me toques estoy contaminada no me beses estoy contaminada no me muerdas imbécil!
A pesar de que vengo preparado realmente no sé por dónde empezar empezaré sacándome las gafas esta barba no crean que es postiza 22 años que no me la corto
Yo Jehová decreto que se termine todo de una vez hago la cruz al sistema solar hay que volver al útero materno doy por finiquitada la cosa
Es un error creer que las estrella… pueden servir para curar el cáncer el astrólogo dice la verdad pero en este respecto se equivoca. Médico, el ataúd lo cura todo.
Los delincuentes modernos Están autorizados para concurrir d… a parques y jardines. Provistos de poderosos anteojos y… Entran a saco en los kioskos favor…
En un rincón de la capilla El eremita se complace En el dolor de las espinas Y en el martirio de la carne. A sus pies rotos por la lluvia
HAY QUE PAVIMENTAR la cord… pero no con cemento ni con sangre como supuse en 1970 hay que pavimentarla con violetas hay que plantar violetas
A los amantes de las bellas letras Hago llegar mis mejores deseos Voy a cambiar de nombre a algunas… Mi posición es ésta: El poeta no cumple su palabra
Nervioso, pero sin duelo A toda la concurrencia Por la mala voz suplico Perdón y condescendencia. Con mi cara de ataúd
Nadie debe ganar + que el Presidente de la República ni —
Ah, es usted señor, usted, acérquese usted mi señor. «El padre de mi Lady»? Bellaco de los quintos infiernos. No soy nada de eso mi Lord. Perdón, os lo suplico. Te atreves a mirarme ...
Yo me mantuve alejado de mi puesto… Me dediqué a viajar, a cambiar imp… Me dediqué a dormir; Pero las escenas vividas en épocas… Durante el baile yo pensaba en cos…
Qué divertidas son Estas palomas que se burlan de tod… Con sus pequeñas plumas de colores Y sus enormes vientres redondos. Pasan del comedor a la cocina
Quién eres tú repentina doncella que te desplomas como la araña que pende del pétalo de una rosa. Tu cuerpo relampaguea