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Gracias

Aunque esté, en la oscuridad
de tinieblas apartado,
siempre hay luz,
al final del camino encontrado,
Tú eres el faro que
orienta mi barco,
en oscuras aguas amarrado,
contigo sé llega seguro,
a un buen puerto arribado. Tú
eres la luz que ilumina mi camino,
de los senderos de mis adentros,
lucero que brilla en el firmamento,
que me guía en las noches oscuras,
agua pura y fresca para es sediento,
aunque caiga en el abismo
del mas triste destierro,
me mostraras el camino.

¡Eres como tomas un frió vino!

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