#EscritoresMexicanos
En llamas, en otoños incendiados, arde a veces mi corazón, puro y solo. El viento lo despiert… toca su centro y lo suspende en luz que sonríe para nadie:
El corazón y su redoble iracundo el obscuro caballo de la sangre caballo ciego caballo desbocado el carrousel nocturno la noria del… el grito contra el muro y la cente…
Infrecuentes (pero también inmerec… Instantáneas (pero es verdad que e… Hay instantes que estallan y son a… Otros son un río detenido y unos á… Otros son ese mismo río arrasando…
Edades de fuego y de aire Mocedades de agua Del verde al amarillo Del amarillo al rojo Del sueño a la vigilia
Tiemblan los intrincados jardines juntan los árboles las frentes cuchichean El día arde aún en mis ojos
AL confín yesca del espacio calcinado la ascensión amarilla del árbol
Toda la noche batalló con la noche… ni vivo ni muerto, a tientas penetrando en su substan… llenándose hasta el borde de sí mi… Primero fue el extenderse en lo ob…
CORRE y se demora en mi frente lenta y se despeña en mi sangre la hora pasa sin pasar y en mí se esculpe y desvanece Yo soy el pan para su hambre
Mi abuelo, al tomar el café, me hablaba de Juárez y de Porfiri… los zuavos y los plateados. Y el mantel olía a pólvora. Mi padre, al tomar la copa,
En fila ordenadas regresamos y cada noche, cada noche, mientras hacemos el camino, el breve infierno de la espera y el espectro que vierte en el oíd…
Es grande el cielo y arriba siembran mundos. Imperturbable, prosigue en tanta noche el grillo berbiquí.
El mar, el mar y tú, plural espejo… el mar de torso perezoso y lento nadando por el mar, del mar sedien… el mar que muere y nace en un refl… El mar y tú, su mar, el mar espejo…
Canta en la punta del pino un pájaro detenido, trémulo, sobre su trino. Se yergue, flecha, en la rama, se desvanece entre alas
a la memoria de Jorge Cuesta Abre simas en todo lo creado, abre el tiempo la entraña de lo vi… y en la hondura del pulso fugitivo se precipita el hombre desangrado.
Mis ojos te descubren desnuda y te cubren con una lluvia cálida de miradas