Tanta inteligencia emocional mal t… tanta miseria de autoengaños e his… tanta caza furtiva de palabras y o… Tanta esperanza innecesaria embote… tanta hipocresía enmascarada en ca…
En el fondo todos somos impostores al aceptar forzosamente un apellid… los átomos no tienen denominación… y las estrellas son rehenes de las… Jugamos a ser dueños de un reino i…
Existen balcones para cada rincón… los hay estrechos con rejas de mie… prisiones creadas por no soltar el… Hay balcones de hipocresía de años… con deudas por no pagar con nuestr…
Ejercer es entender lo que amas asumir el viento y fluir sin traba… rodearse de fe, sin creer en nada invitar a los dioses a visitar tu… Cantar a la tristeza y pintarla de…
En un bar cualquiera de Madrid, a cualquier hora desmemoriada, se pelean dos gallos por una mujer… El alcohol conspira con el ego, la violencia no tiene crédito ni s…
Filósofo de la bohemia gaditana de lentejuelas lúcidas y opacadas poeta de la sonrisa caducada en versos envenenados de miradas. Capitán de un galeón apasionado
Nunca entendí el querer parecer, ese pretender ser espejo de algo fingir ser los pasos de otros paso… perder la esencia por dos mangos Que necesidad querer parecer,
Rostros cansados, manos frías la incertidumbre al terminar el dí… al volver al hogar Sueños heridos, ojos dormidos palabras dolidas, al terminar el d…
Quisiste ser como el pájaro negro… aliviar tus cicatrices soplando co… Huir de Illinois para emprender u… para crear el sonido que ahora aca… No sé cómo lo hiciste Miles, pero…
Te fuiste de tertulia a la vieja… buscando esos diamantes literarios… nadie pudo saber tu escondite mági… solo L’Odéon vio tu huida y tu ra… Tampoco te salvo el corazón Nueva…
Los tiempos muertos pueden curar t… pueden hacerte impermeable ante el… Son horas de silencio que se vuelv… la mejor forma para evadirte de la… Aunque la muerte siempre esté expe…
Los años para algunos son estadíst… anuarios asépticos o almanaques de… Se adjuntan en carpetas, junto a r… y se enmarcan en museos como nosta… Para otros sin embargo, los años s…
Deja correr al agua deja que siga su cauce como las lágrimas de un sauce llorón Deja que busque su afluente
El viento sobre tu pelo. La luz olvidada de una estrella. Los caminos invisibles en tus ojos… El hilo de luz de una ventana. Los pasos perdidos en el asfalto.
Desde mi trinchera de cristal, sin pensar en las represalias ni en las palabras acomodadas que disparan mis entrañas, veo la pátina roja de la misera,